LA RABIA VIENE VOLANDO

Cuando la ciudad duerme murciélagos rabiosos surcan el cielo


La noche se agita con el batir de sus alas. Son los murciélagos, los insectívoros, habitan en las cúpulas de los viejos y señoriales edificios, en las oquedades de los balcones, desvanes, campanarios, debajo de los puentes y taparrollos de cortinas. No son peligrosos y controlan biológicamente los insectos voladores y dañinos para el hombre, por eso se los debe espantar y nunca exterminar, mientras que los vampiros habitan grandes huecos, cavernas o minas abandonadas. El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires han encontrado un murciélago infectado de rabia, su presencia generó pánico en la noche porteña, las autoridades capitalinas llaman a la tranquilidad, fue capturado y aseguraron que no tuvo contacto con personas, ni mascotas del lugar. También informaron que rondan por el cielo otros de estos mamíferos noctámbulos, no se aclaró si se trata de una plaga o episodios ocasionales.

La rabia de los quirópteros generalmente es un fenómeno que se observa más en áreas urbanas, dado que en éstas existe una densidad de población mayor de es en las zonas rurales. Esto es debido a la mayor proliferación de insectos atraídos por el acumulo de basura y por la gran iluminación de nuestras urbes. Un hecho que también ha favorecido la multiplicación de los mismos es la desaparición de sus predadores naturales, como por ejemplo las lechuzas. Estos mamíferos no vuelan igual que las aves, es como si nadaran en el aire, presentan una extensión de piel que va desde sus miembros superiores hasta los inferiores de cada lado; se dividen en hematófagos (vampiros) y no hematófagos. Nunca atacan si no son molestados, pero todas las especies transmiten el virus de la rabia el cual está muy lejos de su extinción. En Argentina hay 57 especies de murciélagos, todas útiles, menos el vampiro el único hematófago, el cual es más agresivo y se muerden con mayor frecuencia. Si están enfermos no pueden volar, están en el piso o vuelan de día, solo muerden cuando están atontados.

El Instituto Nacional de Epidemiología: recomienda principalmente: No tocarlo y colocar un recipiente sobre él para atraparlo y llamar al departamento de zoonosis. Muchas veces, la mordedura es tan pequeña que pasa inadvertida, ante la duda, se debe iniciar inmediato tratamiento antirrábico. Estos animales que llevan a cabo agresiones a humanos son siempre conservados y analizados en el laboratorio de referencia nacional. Se recomienda la profilaxis postexposicion a todo individuo que haya dormido sin vigilancia en una habitación en la que aparece al tiempo un murciélago, ya que no puede excluirse la mordedura durante el sueño, puede no dejar huella visible. El hombre puede trasmitir la rabia por saliva como cualquier otro mamífero. Existe riesgo de rabia también en los animales domésticos, especialmente, el gato ya que éste puede trepar y caza murciélagos instintivamente y los devora empezando por la cabeza, lo que implica un cierto riesgo de recibir una mordedura en los labios o ser lastimado por los huesos del cráneo, en donde el cerebro es la principal fuente primaria del virus.

La Argentina registra casos de rabia en el sur más específicamente en la provincia de Tierra del Fuego. Salud Pública informa que es bueno tener información, pero no es necesario asustar al público, sino prevenir a los padres para que todos ellos eduquen o digan a sus hijos que no toquen animales callejeros, como perros, gatos, murciélagos, etc., ya que pueden tener rabia; también son importantes las campañas nacionales de vacunación antirrábica anual que se realizan a los perros y gatos. Las perdidas económicas: La estimación de daños a la ganadería argentina según cálculos fehacientes, es de 3 a 4 veces mas grave por la mordedura del murciélago hematófago (vampiro) de por sí, que por la transmisión de la Rabia. La mordedura de un vampiro sano causa pérdidas en kilos muchos mayores que las pérdidas en kilos que causa la mortalidad por rabia, que en promedios anuales es de alrededor de 3000 cabezas vacunas por año que se pierden por el virus de la rabia.

Antecedentes en otras ciudades La OMS estima que entre 10 y 12 millones de personas reciben inmunoprofilaxis post-exposición cada año. En el mundo se estima que la cifra real de muertes por rabia al año esté entre 35.000 y 50.000, de las que 30.000 tienen lugar anualmente entre Subcontinente Indio, Sudeste Asiático (Filipinas), África y América latina. Las migraciones entre áreas geográficas, juegan un importante papel en la aparición geográfica de los casos de rabia. Se ha informado de seis personas que han sido mordidas por murciélagos con rabia en España, pero la vigilancia evita muertes como la ocurrida en Escocia. Informó Pablo x. de Sandoval reportero en Madrid - En los últimos 15 años, en España fueron reportados seis casos parecidos al del naturalista al que mordió un murciélago con rabia en Escocia la semana pasada, produciendo su posterior deceso; el Servicio Nacional de Salud británico suspendió todas las licencias para el estudio de murciélagos hasta que se conozcan exactamente los riesgos.
En el Reino Unido el británico Mc Rae, de 56 años, es el primer fallecido en la Unión Europea (UE) por rabia en la última década y único registrado en el último siglo. El Dr. Javier Echevarria, facultativo del Instituto Nacional de Epidemiología de España del laboratorio de referencia de la rabia, explica el cuadro clínico de la rabia: comienza con dolor, angustia, luego el virus va al cerebro y aparece fiebre, malestar, la garganta se inflama y se paraliza, por eso los perros rabiosos no beben agua; finalmente el virus de la rabia provoca encefalitis, entonces es cuando se desarrollan la parálisis, los dolores y la agresividad; la necesidad de morder, no es otra cosa que el medio que utiliza el virus para buscar nuevas víctimas, ya que se transmite a través de la saliva. Además, después de aparecer los primeros síntomas, la muerte ya es inevitable. No hay nada que se pueda hacer.

El Dr. Echeverría recuerda la última víctima registrada de este horror en España, fue un médico mordido por su propio perro en 1975, el hombre se negó a terminar el tratamiento antirrábico. La misma imprudencia mató al naturalista de Escocia, que directamente rechazó el tratamiento. El registro de rabia animal en España desde 1985 al 2003 revela un total 128 casos (7 murciélagos agresores con signos de rabia). En EE.UU. se han descrito más de 30 casos acumulados humanos de rabia transmitidos desde murciélagos insectívoros. Durante el año 2000 en Estados Unidos 5 casos de rabia humana con muerte en varones entre 26-69 años han sido registrados, en cuatro de ellos se ha implicado contacto con murciélagos insectívoros presentes en el domicilio unos dos meses antes, sin que con certeza se pueda hablar de mordedura conocida. En Costa Rica en septiembre de 2001 dos personas fueron mordidas por murciélagos, los pacientes fallecieron, estudios han demostrado la presencia del virus rábico. En Canadá desde el año 1944 hasta el 2000 se han detectado un total de 56 casos de rabia humana.